Fotobló
He pasado el primer fin de semana en Maastricht (y mañana cumplo mi primera semana aquí). Han sido dos días fundamentalmente tranquilos, en los que he podido por fin pasar una tarde-noche con mi amigo David, al que no veía desde que se vino por estos lares, hace unos cinco años. En noviembre pasado hubo otra oportunidad, pero al final la agenda de uno de los dos lo impidió, aunque estuvimos muy cerca de vernos. Mediante unos cuantos paseos por la que será mi ciudad durante unas semanas (ahora creo que, por fin, ya no me perderé), me recomendó varios bares y otros lugares de culto. Los que fotografié al día siguiente no son, desde luego. He quedado en volver a reunirme con él dentro de unos veinte días, cuando él y su mujer regresen de las vacaciones. Espero que esta vez no se me olvide la cámara (estas fotos las hice el viernes y el domingo). Por ahora, el típico autorretrato que siempre me hago con cada amigo con que tropiezo, tendrá que esperar.
Todavía no he subido a mi álbum las fotos que voy haciendo, pero he dejado algunas en flickr (y así, de paso, gasto mi cuota fotográfica de este mes).