Escopeta de feria
Como no soy accionista del banco, puedo decirlo sin temor: El BSCH falla más que una escopeta de feria (al menos, en su vertiente telemática).
Habrá que explicarse... desde hace ya un tiempo, Murphy me la suele jugar cuando intento usar mis tarjetas. Bastante que necesite comprar algo urgente con la 4B o me urja reponer el monedero, para que la caja de la tienda de turno o el cajero automático me suelte un "agotado su disponible para hoy" ¡¡si no he gastado un duro en todo el día!! (a veces, llevaré hasta una semana sin usar la tarjetita murphiana... pero aun así me acusa implacablemente de tener un agujero en el bolsillo)
A todo esto, el típico niñato vendedor del corte inglés ni se inmuta ante el fallo: "será que está en números rojos", "que le han cancelado las tarjetas" o "que como estamos a fin de mes". Y a ti qué c*** te importa, digo yo. Prefiero los cajeros automáticos: al menos se limitan a informarte del (falso) hecho, sin dar su opinión... imagínate que cuando se te agotase el saldo disponible te echase la culpa, "es que Vd no ha cobrado la beca aun, pardillo, jajaja".
No solo eso: el servicio de banca por internet, llamado SuperNet, falla más aun. Casi todos los días, a casi cualquier hora, entrar en el SuperBanco es un SuperSuplicio: últimamente ya ni me responde con que hay un fallo temporal. Es que directamente se queda ahí, SuperAtontado... hasta que cierro el navegador por SuperAburrimiento. Por supuesto, falla cuando más falta me hace. Seguramente de madrugada funcione mejor pero, es que yo vivo de día, ¿sabe usted?
Cambiarse de banco no es precisamente la solución: de mi etapa de currante no tan mal pagado como ahora, tengo abiertos planes de pensiones, pequeñas inversiones y demás que me atan a la entidad. Total, que como opción tengo acudir en persona al banco y reclamar, para quedarse el empleado con cara de póker (y yo con cara de gilip...) cuando éste comprueba delante mío que la tarjeta funciona perfectamente. Sí, claro, hace cinco minutos no funcionaba pero ahora sí.
En fin, me voy a la escuela a ver qué se cuentan...